La medicina occidental se interesa cada vez más por esta terapia milenaria
La acupuntura puede aliviar dolores y proporcionar mayor movilidad a pacientes crónicos si es combinada con otras terapias, según un estudio de la Universidad de Maryland. Una segunda investigación de la Universidad de Southampton ha establecido que la acupuntura resulta más eficaz que un placebo o que la ausencia de tratamiento para paliar los dolores crónicos asociados a las regiones lumbares. Para la migraña, sin embargo, no está comprobado que su eficacia supere otros tratamientos, según una tercera investigación germano suiza. Las tres investigaciones se han publicado casi simultáneamente en diferentes revistas científicas, revelando el creciente interés de la medicina occidental por esta terapia milenaria. La acupuntura es practicada por 15.000 terapeutas en Estados Unidos y por otros 12.000 en Europa, según la Organización Mundial de la Salud, que señala que sólo 25 de los 191 Estados miembros han desarrollado hasta ahora una política sobre medicina tradicional y terapias alternativas.
Un
equipo de investigadores de la University of Maryland School of
Medicine, en Estados Unidos, ha descubierto que la acupuntura
tradicional china reduce significativamente el dolor y aumenta las
funciones motoras de los pacientes que padecen osteoartritis en la
rodilla, señala un comunicado de esta misma universidad.
Los resultados del estudio han sido publicados en losAnnals of Internal Medicine. Según Brian Berman, encargado de la investigación y director del University of Maryland Center for Integrative Medicine, la acupuntura añadida como tratamiento para pacientes que tomaban anti-inflamatorios que no les aliviaban del todo sus dolencias, ha hecho que sus capacidades motoras mejoren significativamente.
La osteoartritis es una de las enfermedades más antiguas y comunes entre los seres humanos. Como consecuencia de ella, el cartílago de las articulaciones se desgasta, lo que puede causar dolor y rigidez en las articulaciones. Esta enfermedad también recibe el nombre de enfermedad articular degenerativa, artrosis, osteoartrosis o artritis hipertrófica.
Existen muchas afecciones y dolencias que pueden causarla, como el exceso de peso, una lesión en una articulación, la debilidad muscular, determinados daños en los nervios que suplen la zona de las articulaciones, la enfermedad del sinovio e incluso factores hereditarios.
Mejoría
en un 40% de los casos
Esta enfermedad ocasiona dolores que impiden que la gente realice una actividad normal. Ahora se demuestra que la acupuntura, combinada con la medicación, puede ayudar a aliviar los síntomas y a que los pacientes puedan realizar sus actividades cotidianas.
El estudio ha sido realizado con 570 participantes, lo que supone el mayor análisis realizado hasta la fecha de los efectos de la acupuntura. Los investigadores dividieron a los participantes en tres grupos. Uno de ellos, recibió clases sobre la artritis, otro se sometió a un falso tratamiento de acupuntura, recibiendo pequeños golpes con las agujas en las rodillas, sin que éstas les fueran clavadas. Por último, el tercer grupo recibió un tratamiento de acupuntura real.
Las agujas de la acupuntura son de acero y tan finas como un cabello, y no producen dolor cuando son clavadas en la piel, si se clavan correctamente. Los acupuntores que participaron en el estudio taparon a los pacientes durante los tratamientos para que no viesen lo que se les hacía, ni pudieran saber si el tratamiento era real o no.
Los dos últimos grupos fueron tratados –real o ficticiamente- durante un periodo de 26 semanas. Al principio, los tratamientos se realizaron dos veces en semana y se fueron reduciendo gradualmente hasta llegar a una vez al mes. El grupo que participó solamente en los cursos acerca de la artrosis recibieron pautas sobre el cuidado de sí mismos y de su enfermedad.
Al término de las 26 semanas, los pacientes que habían recibido verdaderamente el tratamiento con acupuntura china habían mejorado más, tanto en cuanto al dolor como en cuanto a la recuperación de sus funciones motoras, que el resto de los participantes de los otros dos grupos.
En total, el porcentaje de mejora con respecto a los otros alcanzó el 40%, según una medición que siguió el índice del método Western-Ontario MacMaster (WOMAC). Todos los pacientes siguieron tomando su medicación habitual y se demostró además que la acupuntura no tenía efectos secundarios, lo que la convierte en un tratamiento saludable y efectivo, según los investigadores.
Otros
estudios
Por otro lado, un segundo estudio de la universidad inglesa de Southampton, publicado en NeuroImage, ha demostrado asimismo que la acupuntura funciona realmente gracias a una serie de experimentos y de resultados obtenidos por medio de escáneres cerebrales.
Los resultados de este estudio sugieren que la acupuntura tiene un efecto fisiológico comprobable en el cuerpo, al mismo tiempo que la expectativa y la creencia de los pacientes con respecto a un tratamiento potencialmente beneficioso, modulan la actividad cerebral en las áreas relacionadas con el mecanismo de recompensa.
Según este análisis, la acupuntura resulta más eficaz que un placebo o que la ausencia de tratamiento para paliar los dolores crónicos asociados a las regiones lumbares. Sin embargo, las agujas no demostraron una eficacia superior a la de otras terapias con las que se las compara, como los masajes o el ejercicio físico.
Sin embargo, un tercer estudio germano-suizo, publicado en el Journal of the American Medical Associationes más cauto que los anteriores respecto a la eficacia de la acupuntura. Este estudio se centró en 302 perconas aquejadas de jaqueca o migraña y durante ocho semanas utilizó la misma técnica de ocultar a los pacientes quiénes estaban siendo tratados realmente con acupuntura y quienes no.
Las diferencias entre unos y otros después de los diferentes tratamientos no fueron significativas: el 53% de los pacientes mejoraron sin acupuntura real, frente al 51% que experimentaron mejoría gracias a las agujas chinas.
Terapia
milenaria
Existen escritos de origen chino de más de 2000 años de antiguedad que atestiguan las propiedades curativas de la acupuntura. Su fundamento tiene mucho que ver con la filosofía taoísta del ying y el yang, los dos aspectos opuestos y complementarios, con los que, según esta cultura, se puede manifestar la energía universal.
En el cuerpo humano, esta energía fluye a lo largo de catorce canales invisibles, llamados meridianos, relacionados cada uno de ellos con los principales elementos y funciones del organismo, y que conectan entre sí la piel con los órganos de manera parecida a las correspondenicas de Head. El neurólogo británico Henry Head (1861-1940) fue el primer científico occidental que encontró claras correspondencias entre órganos internos y áreas de la piel, que se conocen hoy como las zonas de Head.
Según la tradición china, en las personas sanas, los dos principios básicos, el ying y el yang, coexisten en equilibrio armónico, con cierto predominio de uno sobre otro dependiendo de la hora del día. Por eso, cuando el equilibrio se rompe aparece la enfermedad. Las agujas, que son de oro, plata o acero, se insertan en la piel a lo largo de los meridianos. De acuerdo a la dolencia será en qué punto de los mismos serán aplicados.
Estrategia de la OMS
El creciente recurso por parte de la población occidental a la acupuntura y otras formas de medicina tradicionales, llevó a la Organización Mundial de la Salud a definir una estrategia global sobre estas terapias, recogida en el documento Estrategia de la OMS sobre medicinatradicional 2002–2005.
Según este documento, en Europa existen 15.000 acupuntores y en EEUU se contabilizan 12.000 licencias acreditadas. El organismo de Naciones Unidas señala el creciente interés de los enfermos por acceder a las terapias alternativas y fomenta su integración en los sistemas públicos de salud, aunque al mismo tiempo exige que se garantice su seguridad, eficacia y calidad.
Según la OMS, la preocupación sobre los efectos adversos de los fármacos químicos, las cuestiones asociadas a los enfoques y suposiciones de la medicina alopática, el mayor acceso del público a información sanitaria y los cambios en los valores (como el rechazo al paternalismo médico), son algunos de los motivos por los que el uso de las terapias alternativas es cada vez más común en los países desarrollados.
Actualmente, sólo 25 de los 191 estados miembros de de la OMS han desarrollado una política sobre medicina tradicional y terapias alternativas. En España, la situación de la medicina complementaria puede definirse entre «el entusiasmo crítico y el escepticismo no informado», si bien la Universidad de Zaragoza imparte un master en esta disciplina.
De acuerdo con el informe del organismo internacional, apenas hay datos fiables sobre el gasto sanitario que genera la demanda de medicina tradicional, aunque en países como el Reino Unido o Canadá equivale, aproximadamente, a una sexta parte del presupuesto global español para salud.
Las tres investigaciones que analizan la eficacia de la actupuntura se han publicado casi simultáneamente en difernetes revistas científicas, lo que revela el creciente interés de la medicina occidental por esta terapia milenaria, tal como ha señalado la OMS.